Carrera Nocturna del Guadalquivir 2013
Y bajo un inusual aguacero más de una docena de correcaminos, acompañados por otros muchos compañeros de trabajo, familiares y amigos, se dieron un gran homenaje de atletismo y compañerismo en la vigésimo quinta edición de esta ya tradicional fiesta nocturna hispalense.
Se anunciaban más de 20.000 participantes, aunque muy probablemente las difíciles condiciones dejaron a más de uno en casa... ¡ellos se lo perdieron! pues, una vez superado el impacto inicial de dejar el cobijo calentito del autobús para exponerse a la intensa lluvia (por arriba y también por abajo, por el salpicar de los vehículos con los que nos cruzamos y el propio nuestro sobre los charcos), la experiencia bajo el agua es siempre estimulante y divertida.
Tensa espera bajo el arco de salida, con un incesante manto de agua sobre nuestras cabezas, para dar paso a un imposible discurrir por el paseo de las Delicias. Ardua tarea la de avanzar esquivando a unos y a otros, a quien se para a hacer fotografías, a quien departe con sus amigos con grandes aspavientos, a quien equivoca su lugar en la serpiente de corredores y ve como centenares de atletas lo sobrepasan por cada lado. Alguno, como Manolo Fortes nos contaba que apenas pudo empezar a trotar antes de retornar de nuevo al parque María Luisa. Los más avezados, tuvieron una puesta a punto progresiva y un final de carrera meteórico en compensación.
José Luís, Juan María, Cepeda, Rocío, Fonsi, Roque, Carlos, Noni, Víctor, Elena, María, Alfonso Rguez., Barneto, Cristóbal, Francisco, Paco Ruiz, Forte, David, Isco, José Manuel, Antonio Martínez, Manolo Flores, Alberto, Mario, Pedro y Aurelio. Y como lo que más gusta es el resumen en imágenes, ahí va un adelanto.
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